Conocer y controlar la acumulación de calor en llantas comerciales
Equipo de Bridgestone | 26 de septiembre de 2024 | Lectura:10 minutos

No importa dónde vivas o qué vehículo conduzcas: cuando las temperaturas comienzan a aumentar, el calor puede afectar las llantas de camiones y autobuses. El conocimiento de los factores que contribuyen a la acumulación de calor puede ayudarte a controlarlos mejor para mejorar la seguridad, minimizar el tiempo de inactividad, prevenir los daños en las llantas y prolongar la vida útil de las carcasas.

Esto es lo que necesitas saber

¿Qué causa la acumulación de calor?

Conducción a alta velocidad: una llanta genera internamente calor según la velocidad de rotación. Ir más rápido que la calificación de velocidad máxima de la llanta acumula calor y puede hacer que falle prematuramente. Si bien la idea de conducir más lentamente quizás no resulte atractiva, el tiempo que ahorras por no tener que lidiar con llantas dañadas o incluso una falla inesperada, supera por mucho el poco tiempo que se pierde por viajar a una velocidad más baja.

Carga de la llanta adecuada: las llantas tienen calificaciones máximas de capacidad de carga y velocidad. Conocer y acatar las capacidades máximas de transporte de carga de tus llantas te ayudarán a garantizar que no se sobrecarguen, lo que generaría una acumulación de calor adicional y podría ocasionar que fallen prematuramente.

Las tablas de & inflado de carga TBR de Bridgestone pueden ayudarlo a comprender la capacidad de carga máxima de su neumático, manteniendo su flota segura en la carretera.

Inflado adecuado de la llanta: es importante que tengas y utilices un medidor de aire para revisar regularmente la presión de la llanta. La presión de llanta recomendada de tu vehículo se muestra en la placa que suele encontrarse en la jamba de la puerta del lado del conductor. Mientras que la mayoría de las personas se preocupan por el inflado excesivo, es esencial saber que el inflado insuficiente puede causar la acumulación de calor adicional que puede ocasionar fallas prematuras en las llantas.

Fuentes externas de calor: las temperaturas ambiente elevadas, las características aerodinámicas que restringen el flujo de aire y los equipos de control de emisiones del vehículo pueden causar una excesiva acumulación de calor en la cavidad del guardabarros y contribuir a la aparición de fallas en las llantas relacionadas con la alta temperatura.

¿Qué tendencias afectan la acumulación de calor?

Los factores que contribuyen al calor en las llantas son aditivos y van en aumento. Algunos factores y tendencias descubiertos en pruebas recientes han afectado las llantas comerciales Bridgestone y de otras marcas, incluidos los siguientes:

Características aerodinámicas cerca de la cavidad de la rueda: evoluciones recientes en la aerodinámica del vehículo para mejorar el ahorro de combustible pueden llevar a la acumulación de calor en las llantas debido a la falta de paso de refrigeración por el flujo de aire. Cualquier cosa que genere un menor flujo de aire puede aumentar la acumulación de calor en tus llantas.

Mayores límites de velocidad: cuando sabes que la velocidad afecta la acumulación de calor en tus llantas, no sorprende que al aumentar los límites nacionales de velocidad de 55 mph a más de 70 mph haya aumentado la posibilidad de mayor calor en los llantas. Operar tus llantas por encima de la calificación de velocidad máxima, la cual puede ser inferior a los límites de velocidad permitidos, ocasiona una excesiva acumulación de calor, lo que quizás genere fallas prematuras en las llantas.

Conducción en equipo: si bien la conducción en equipo tiene un impacto positivo en los conductores y su capacidad de estar seguros y bien descansados, y de transportar más productos en menos tiempo, se debe considerar el uso continuo de las llantas de sus vehículos. Además, si conduces a alta velocidad, recorres largas distancias o manejas con el calor del verano, es fundamental que permitas que las llantas se enfríen. 

Equipos de control de emisiones: evoluciones recientes en los equipos de control de emisiones y el motor pueden elevar las temperaturas dentro y alrededor de las cavidades en el guardabarros de la llanta de dirección.

Cargas más grandes: hay ocasiones en las que las autorizaciones estatales permiten una mayor capacidad de carga por encima de la establecida por las regulaciones federales. Cada vez que transportes una carga más pesada, deberás tener aún más en cuenta la presión de llanta, la velocidad y la temperatura ambiente. Cargar demasiado las llantas causa una acumulación de calor excesiva y puede hacer que fallen prematuramente.

¿Cuál es el riesgo de sobrecalentar las llantas?

Seguridad: probablemente el factor de riesgo más importante del sobrecalentamiento de las llantas sea la seguridad tanto del conductor como de las personas en la carretera. La falla inesperada de una llanta puede poner en riesgo de accidentes a los conductores y pasajeros cercanos. Comprender cómo ocurre el sobrecalentamiento de las llantas puede ayudar a salvar vidas.

Daño a las llantas: el calor excesivo tiene un gran potencial de dañar la carcasa de la llanta, lo que podría impedir su recauchutado.

Ahorros en flotas de vehículos: el mantenimiento apropiado de las llantas cuando hace calor, o bajo cualquier circunstancia, puede reducir el tiempo de inactividad, aumentar el ahorro de combustible e impulsar una mayor eficiencia. Cada vez que lidias con la inactividad relacionada con las llantas, pierdes tiempo y productividad.

¿Cómo se puede limitar la acumulación de calor excesiva?

Sistemas de monitoreo de presión de neumáticos: Bridgestone recomienda el uso de sistemas de monitoreo de presión de neumáticos (TPMS) para aumentar la conciencia. El propósito de un TPMS en tu vehículo es advertirte que el inflado de al menos una o más llantas es significativamente insuficiente, lo que posiblemente cree condiciones inseguras de conducción.

Bridgestone IntelliTire to IntelliTire toca y monitorea automáticamente la presión de los neumáticos, simplificando el mantenimiento de los neumáticos de la flota. Es una plataforma de control automatizado de llantas creada para reducir costos, aumentar la productividad de la mano de obra y mantener el funcionamiento seguro de las flotas de vehículos. La aplicación IntelliTire, que ha demostrado reducir el tiempo de inactividad relacionado con las llantas hasta en un 40 %*, hace que el mantenimiento de las llantas sea sencillo para las flotas de vehículos al brindar información procesable e informes fáciles de usar en sus manos, en todo momento. Al ser una plataforma independiente de la marca, IntelliTire funciona con cualquier llanta y con cualquier flota de vehículos.

Bridgestone recomienda prácticas comunes de mantenimiento para ayudar a prevenir la excesiva acumulación de calor en las llantas:

  • No superes la velocidad nominal máxima de la llanta, la cual puede ser inferior a los límites de velocidad permitidos.

  • No superes la capacidad máxima de carga de la llanta. 

  • Establece las presiones de inflado adecuadas en frío que figuran en la placa del vehículo y mantenlas.

  • Usa un manómetro de presión de llantas para revisar las presiones de inflado de las llantas a intervalos de mantenimiento preventivo y durante las inspecciones del vehículo previas a un viaje.

  • Inspecciona regularmente las llantas en busca de daños, como cortes, grietas, protuberancias, desgaste irregular y penetraciones.

En definitiva, comprender los factores que afectan el calor en las llantas es esencial para maximizar su rendimiento a la hora de operar tu camión o flota de vehículos.

Una vez que el calor daña las llantas, el impacto es irreversible y se acumula con el paso del tiempo, de modo que estar atento es un paso esencial del proceso. Es fundamental que monitorees y controles los factores que contribuyen al calentamiento de las llantas que están bajo tu control.

Como conductor u operador de flota de vehículos, es de vital importancia controlar la velocidad, la carga y las presiones de inflado. Estos son tres factores clave influenciados por el conductor que contribuyen a la acumulación de calor en las llantas. Al controlar estos factores, puedes ayudar a mejorar la seguridad, minimizar el tiempo de inactividad y extender la vida útil de la carcasa de la llanta.
 

 

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